O de como las abejas se impondrán.
No existen verdades ni
mentiras absolutas, las purezas 100% vírgenes, solo son creadas por algunas de
nuestras mentes, la maldad o la bondad no la vas a encontrar impolutas en
ningún lado, nuestra propia naturaleza nos empuja hacia los matices grises o
hacia las paletas de colores, y allí es donde realmente escogemos hacia que
parte nos sentimos identificados y cómodos, empezamos a encontrar nuestra
propia naturaleza.
Hagan memoria, no tan
larga, es más, muy corta: “se derrumbó el Bitcoin”, “la burbuja exploto”, “se
acabó la fiebre”, “caída libre de las criptomonedas”, “el desplome es total,
adiós”, estos titulares y otros, un tanto más escandalosos, de “medios
especializados”, de algunos que ni idea tienen sobre estos temas, y con fama de
“serios”, se vienen repitiendo desde
hace un buen tiempo, han matado, acabado, sepultado y despedido a las
criptomonedas infinidad de veces, lo
malo ni siquiera es el juego perverso de la manipulación y la desinformación,
que ya de por si es muy pésima señal, de la supuesta objetividad periodística
que tanto pregonan y se jactan, lo peor, es que no tienen escrúpulos para
repetir una y otra vez la misma historia, le cambian las fechas y los gráficos,
aumentan los rojos de sus escritos y listo, anuncian nuevamente el fin de esta
nueva era, ya en estos pocos años de nacimiento del mercado de cryptos, hemos
presenciado varios colapsos definitivos, de acuerdo a estos medios.
Y por supuesto que cada
quien puede y está en su total y respetado derecho, de tener la posición que
mejor le agrade o le convenza sobre las criptomonedas, los que impulsamos con
fuerza su adopción y la de la tecnología de las cadenas de bloques, defendemos
como premisa fundamental, precisamente los temas de democratización, código
abierto y descentralización, el asunto
es que una cosa es el sano, y normal debate donde cada persona manifiesta sus
ideas y otra muy diferente, es la continua y grosera manipulación informativa,
que algunos insisten en utilizar de manera insistente y permanente, no quiero
pecar de ingenuo, por supuesto que conocemos los hilos de los intereses que se
mueven alrededor, solo lo traigo a colación para que en esta guerra de
tulipanes nadie caiga por inocente o porque no sabía lo que pasaba, recuerden
que a pesar del dicho, guerra avisada si mata soldados, sobre todo, si al final
y con todos los peligros insisten en ir a ella.
Si nos tomamos un
tiempo para ver cómo marcha la evolución tecnológica de la humanidad en los
últimos 100 años, digamos desde el 1918 hasta hoy, verán como, sin conflictos
bélicos mundiales ni participación masiva de personas, hemos avanzado
exponencialmente los recientes 40 años de manera increíble, lo que normalmente
dábamos por sentado como algo que duraría mucho tiempo, hoy su vida útil apenas
sobrepasa un año, y no porque la tecnología que lo creo no sirva, no, sucede
porque sobre ella o a los lados, se desarrolló una nueva, que simplemente lo
desplazo, y vamos a entenderlo, nuestras percepciones, mapas y suiches mentales
en lo absoluto están preparados para tamaño salto, que ya no damos en décadas,
ni años, sino en horas y meses, acostumbrados a sopesar, reflexionar y
verificar las cosas con un margen relativamente cómodo, ahora tenemos un
mercado que no duerme, no deja de producir nunca, no descansa y no da respiro,
la disrupción de nuestras mentes solo es el principio de una realidad que va a
cambiar radicalmente todas nuestras relaciones como individuos y sociedad, hoy
más que nunca las abejas tienen la certeza de imponerse, aunque, clarísimo que
no será fácil ni sencillo.
El río subterráneo de
la micro economía, por vez primera, tiene la alternativa de interconectarse, de
manera directa, descentralizada, sin intermediarios, de forma eficaz y
eficiente a nivel mundial, puede establecer relaciones profundas, negociar
bienes, activos y servicios, puede obtener financiamiento y otorgarlo, está en
capacidad de generar un valor agregado, impensable hace apenas unos 8 años
atrás, el tiempo lineal, como hemos tratado desde nuestras líneas, ha abierto
el paso a un modelo que procura abrirse su propio camino y que
irremediablemente sustituirá al estado actual de las cosas como las conocemos,
el futuro ya está entre nosotros, la gran mayoría no lo ve, ni lo siente, pero
eso no define su existencia, solo se le hace esquiva a muchos.
El Blockchain y las
criptomonedas incluso están evolucionando todos los días, estamos apenas en su
etapa de crecimiento temprana y ya se empiezan a producir intensos cambios que
nacen de su propio interior, su ecosistema de descentralización distribuida,
genera sus propias herramientas para concebir modificaciones y nuevos
descubrimientos, que nos hagan avanzar un paso más allá, siempre hemos visto
como las cosas funcionan aparentemente sencillas: un carro, la electricidad, la
internet, la mayoría lo asume como natural y transparente, no se preocupa cómo
es que marcha, ni mucho menos como hemos llegado hasta aquí.
El mercado de
intercambios de las cryptos es un importante engranaje del sistema, pero no es
el único, quienes quieran dedicarse a la especulación financiera, tendrán que
tener aguante y nervios para lidiar una novel bolsa, que tiene muy poca
historia, los embates están en etapa temprana y ahora es que queda tela por
cortar en esta criptoindustria, su consolidación está íntimamente ligada con la
fortaleza de sus proyectos y del uso masivo de sus aplicaciones, pero no de una
en particular, ni de una crypto en específico, sino de muchas que resolverán
temas micro, que como colmena, distribuida relaciones a toda la comunidad, es
un movimiento complejo donde cada uno de los factores cumple un rol y un
momento.
Así las cosas, les
ratifico que vamos a tener un año 2018 inolvidable y espectacular, los dolores
del crecimiento se van a acentuar a ritmos de caos, las subidas y bajadas
dejaran sin aliento a más de uno, y mientras tanto, aguas abajo, el enjambre va
continuar colocando las ¿¡viejas!? y las nuevas cadenas de bloques dentro del
proyecto mayor y hacia allá, seguro, avanzaremos sin pausa, al compás del
código abierto del Blockchain.