Jugando banco.
Y va a caer, y va a caer este gobierno….Uh, ah el banco no se va….., no, no se trata de tomar a tono de chiste lo que acontece dentro de una pequeña parte del sector financiero Venezolano, mucho menos burlarse de él inimaginable drama personal que viven casi el millón de ahorristas que sienten haber perdido todo o los miles de trabajadores, de las agencias y de las empresas relacionadas, que de golpe y porrazo temen quedar en la calle y sin respuestas ciertas sobre sus haberes, es por el contrario unas frases que nos ubican un poco en este teatro de lo absurdo en que se nos ha convertido nuestra existencia en la actualidad y nos permite pasar a precisar con el mayor grado de objetividad posible lo que está sucediendo en realidad, mas allá de la retorica oficialista y de las risas extremistas de algunos profetas del desastre perenne.
En primer término la gran mayoría de la banca del país goza de buena salud, a pesar de la critica situación económica que no le ha permitido cumplir con el rol fundamental de ser un intermediario financiero y no un apostador de riesgo estatal, posee adecuados niveles de capitalización y ha sido manejada con idóneos criterios gerenciales, y todo dentro de un escenario de continua presión y multas por cumplir con carteras obligatorias que no tienen la demanda necesaria al no haber quien se arriesgue a invertir en este pandemonio desfile de insultos y amenazas de quien debería ser el primer interesado en mantener el saludable nivel de confianza y no atizar el fuego en su continuo juego de generar caos y confusión mediática.
Segundo, el problema cardinal no es quienes son los banqueros caídos en desgracia hoy, eso dejémoselo a los chismosos y faranduleros que solo buscan, como buenos prevenidos al bate, lanzar a sus opinadores de oficio a profundizar la llaga y construirse una aureola revolucionaria en el intento de ocupar su lugar, lo verdadero, lo que se quiere tapar con el gigantesco centrimetraje en todos los medios de comunicación es la confirmación definitiva de que estamos no solo frente a las mayor estafa en la historia del país, sino junto a las más oscura y nauseabunda etapa de una Sodoma y Gomorra especulativa que escapa a los peores escenarios vistos y pensados en algún momento por alguno de nosotros, ¿o es que acaso dudamos de que todas estas incontables fortunas de estos boliburgueses fabricadas en tiempo record y fruto del tráfico de influencias, sustanciosas comisiones y manejos discrecional de contratos e información privilegiada se realizaban con el concurso de funcionarios de bajo nivel? ¿Cómo siete pequeños bancos propiedad de esta camada de ricachones socialistas, tenían al 30/09/09, según cifras de SUDEBAN, de los 42.000 millones de bolívares del estado la bicoca de 6.000 millones? ¿Que explicación lógica tiene que estos 42 mil millones representen una tercera parte del presupuesto nacional en ejecución y que reposen en bancos privados, mientras nos endeudamos con mas de 25 mil millones de dólares? Podemos seguir realizando preguntas que seguro ustedes tendrán una posible respuesta, lo indiscutible es que ninguna de estas operaciones hechas a través de estos años se pudieron realizar sin el concurso y el visto bueno de las principales autoridades financieras y monetarias de este país, quienes por cierto han sido rotados de cargo en cargo como si se tratada de una ruleta rusa criolla, donde las verdaderas bajas son los pendejos que confiaron en quienes fueron elegidos, algunos, y nombrados otros, para velar por los intereses del colectivo.
Finalmente es oportuno indicar que esperamos que realmente se tomen medidas serias que eviten males mayores a la población, este momento ojala sirva para entender que por encima de nuestras diferencias políticas esta el país, no se puede seguir jugando al desastre con la idea de sacar piches ganancias personales o grupales, es obligación del estado recuperar la credibilidad en el sistema financiero y proceder a sanear ese ministerio de economía y finanzas, si así lo hiciese perfecto, estaría cumpliendo su deber, de lo contrario confirmaría una vez mas lo que muchos pensamos sobre este régimen devenido en una suerte de garito colectivo donde la moral y luces hace rato se fueron de vacaciones y se impone, muy a pesar de vociferar lo contrario, el bandalaje y la corrupción como norte socialista.