Pixabay |
Cuando una tecnología
se vuelve cotidiana a las grandes mayorías les parece que siempre ha existido,
se hace transparente realizar la actividad que está permita y todo avanza como
si hubiésemos nacido con ella. Atrás quedan las investigaciones, los éxitos y
fracasos, todo se concentra en que con un solo toque, un giro o un clic
logramos hacer cosas que técnicamente no entendemos pero que en la práctica nos
da el resultado que esperamos. El nacimiento de la Internet como la hemos
conocido hasta hoy, sucedió apenas hace 35 años, literalmente ayer. Desde ese
momento no ha dejado de correr torrentes cada vez más poderosos de agua en la
red y les puedo garantizar que con la incursión de la Blockchain, esto apenas
comienza.
El cambio global que
arranco con el internet, abrió una caja de pandora, una gran cantidad de
teorías vieron la oportunidad de dar el salto y convertirse en realidades, de
la mano de la cadena de bloques, el internet del valor empezaba así a dar sus
pasos iniciales, como siempre las grandes mayorías ni se enteraban de lo que
pasaba, pero el avance desde entonces ha sido impresionante. Hoy, igual que en
el pasado, habrán algunos que dirán que lo que está sucediendo es una moda, les
recomiendo que ni los vean, el tren del futuro ya no usa ruedas y el que se
quede atrás, simplemente desaparecerá de la escena. Vivimos los tiempos que
muchos llamaron ciencia ficción hasta hace poco.
Las relaciones
económicas están modificándose, de eso tengan seguridad, lo que nadie sabe es
ciertamente hacia donde se ira yendo el camino. Hoy puedes negociar con
Criptomonedas en cualquier parte del mundo sin la intermediación de ningún
banco en cuestión de minutos, también puedes mediante la unificación de las
finanzas y tecnologías, las Fintech, acceder a productos financieros sin
necesidad de visitar ningún local bancario y en tiempos impensables hasta hace
poco. Como si esto no fuera suficiente, con la Blockchain esta surgiendo un
tipo de organizaciones Poli-Omnipresentes que entrecruzan los límites entre el
comercio, la industria, la producción, los servicios y la banca, descubriendo
así senderos para nada explorados en el mundo.
La Blockchain se ha
convertido en la bisagra que empieza a modificar la economía global, pero ni es
la única, ni todo está dicho sobre ella. Pasamos de intercambiar información a
transferir y negociar valor, estamos presenciando el nacimiento de la economía
tokenizada y donde cada uno de los que pretenden ser actores principales de
este nuevo mundo interconectado y distribuido están tomando posiciones. Deje de
estar viendo su propio ombligo y no le haga mucho caso a esos gigantes
financieros y comerciales que hablan pestes del Bitcoin y las criptomonedas,
los más avanzados hace rato están realizando inversiones, investigaciones,
pruebas y proyectos para adecuarse a lo que ellos creen que se viene.
IBM y la poderosa
Maersk ya activaron una empresa, Tradelens, que con la cadena de bloques como
estandarte y la inteligencia artificial y la big data como acompañantes,
pretenden unificar toda la estructura de importación y exportaciones mundiales por una sola vía.
Con 94 importantes empresas aliadas, 240 puertos en lista y varios gobiernos
participando están dando los pasos iniciales para la creación de lo que pudiese
ser la primera gran organización empresarial del futuro.
En el 2020 se estima
que unas 450 millones de personas en el mundo usen una billetera virtual, de
las casi inexistentes Fintech que habían hace 10 años, hoy tenemos más de 7200
y creciendo, durante el primer semestre
de este año han surgido 881 ICOs con una inversión de más de 8.584 millones de
dólares. De los 125 países que se tiene información, el 64,57% considera legal
al Bitcoin, 19,68% tiene una posición ambigua y solo 15,75% lo considera
ilegal. Son datos reales de diferentes sectores que confluyen en las diversas
opciones por donde se está generando la ruta de esta nueva economía.
Y es que el espacio en
lo absoluto lo tiene reservado única y exclusivamente los poderosos de esta
era, por supuesto los más audaces y visionarios de ellos quieren seguir
reinando, eso es lógico. Su apuesta es fuerte, la mayoría lo hace de manera discreta,
algunos inclusive dan la sensación pública de no estar para nada interesados,
pero por dentro los movimientos son rápidos y furiosos, incluso bancos
centrales de importantes economías están avanzando hacia la emisión de activos
digitales basados en la blockchain.
Las nuevas tecnologías
rompen literalmente paradigmas de hoy, la idea de sedes centrales ya no es
necesaria para desarrollar una poderosa organización, la limitante del capital
financiero tampoco marca un obstáculo insalvable para individualidades o
pequeños proyectos. El desarrollo en la red es ahora multifuncional, abierto,
colaborativo, literalmente sin fronteras, a bajo costo, con numerosas opciones
de estudio, formación, intercambio, trabajo, muchas sin intermediarios y
poderosamente cierto.
La Blockchain está
abriendo bisagras anteriormente cerradas para la mayoría, cuando modificas la
economía irremediablemente cambia el resto de la sociedad tal como la hayamos
conocido hasta ese momento. No solo las empresas no serán ni las mismas, ni la
misma, la formación y la educación tampoco serán para nada como lo es hoy, y es
lógico, frente a nuevas formas de organización, se hacen necesarias nuevas
habilidades, nuevos conocimientos, una actitud y aptitud totalmente diferentes.