Vamos, que salvo los
perdidos en el espacio, hasta los más rancios pero no estúpidos, como JP Morgan y Facebook, saben que la
cadena de bloques y las criptomonedas llegaron para quedarse y son el futuro de
la economía.
Aléjate de las
nebulosas informativas que pretenden crear la sensación de que la tokenización
de cada uno de los diferentes sectores de la sociedad está a unos distantes
años luz de volverse realidad, te entretienen, te distraen y después te vuelven
a colocar en el carril más conveniente para los poderes constituidos.
Desde ciudadanos
arruinados por regímenes como el venezolano, que buscan refugio para
salvaguardar su patrimonio fundamentalmente en el bitcoin, gobiernos como el de
Malta y Estonia procurando crear nuevas formas financieras y productivas,
sociedades como Corea del Sur, Dinamarca, Noruega o Singapur que intensifican
su uso en sustitución del efectivo, extensas comunidades en África que
experimentan la economía cooperativa y el intercambio por medio de M-Pesa, o
inclusive los norteamericanos y algunos de sus Estados, junto a poderosas
economías como Japón, Inglaterra, Alemania y China, a pesar de las
restricciones y confusiones oficiales, las criptomonedas cada día ganan más y
más espacios a nivel mundial.
Si bien no podemos
hablar de una extensión global de adopción, no cabe duda de que ya los mercados
han empezado a asimilar las cryptos. Todos los importantes ya pasaron la
primera etapa del duelo, la negación, y otros incluso han llegado al nivel de
aceptación. El movimiento es indetenible.
La historia de todos
nosotros nos enseña que los cambios más poderosos provienen de la estructura
económica, esta será nuevamente determinante para el futuro de los modelos
sociales y políticos.
No será este nuevo
ciclo de la humanidad precisamente unidireccional, habrá múltiples y fuertes
protagonistas y quienes terminen por entender, asimilar, unificar y poner en
práctica su visión, y masifiquen su opción, serán quienes al final se impongan
en lo que se viene.
Ahora precisamente que
se están dando estas no tan silenciosas batallas, debemos profundizar
adecuadamente para ver cómo avanzan en diferentes direcciones los actores. Las
criptomonedas y los distintos token desarrollados, son una realidad en campos
tan diferentes como el derecho, la gestión de contenidos, el arte, los derechos
de autor, los medios de comunicación, las cadenas de suministros, la
agricultura, los puertos, la cadena de producción, los bienes raíces, la
gestión pública y en definitiva todos los ámbitos productivos en donde
desarrollamos nuestras actividades.
No nos confundamos ni
nos enredemos con las inmensas aplicaciones de la blockchain, de la que hemos
conversado anteriormente y eventualmente seguiremos extendiéndonos, con la
disrupción que representa la cadena de bloques para la economía directamente.
Negociar, vender,
comprar, intercambiar, mover, transferir sin fronteras, sin intermediarios, una
cantidad de bienes, servicios, activos y pasivos sin necesidad no solo de
ningún gobierno o sistema financiero, sino también sin la obligatoria acción de
cambiar cryptos a fiat es no solamente posible, está sucediendo en nuestras
narices. Si no logra olfatearlo o verlo, es buen momento para que intente
azuzar, a los tiempos, sus sentidos.
Hoy con mis BTC, ETH, BCH,
DASH, XMR, ZEN, XLM, o XRP puedo desde mis Wallet móviles, de escritorio, de
papel, incluso por mensaje de texto, comprar un pasaje por avión, pagar mi
hotel, comer en restaurantes, solicitar créditos, cancelar taxis, realizar
donaciones transparentes y seguras, matricularme en la Universidad, recibir
‘intereses’ por ellas o realizar operaciones en cualquiera de los 4 mil 399 ATM
que funcionan en el mundo.
La gestión de las
criptomonedas replantea costos, instituciones, gobiernos, intermediarios y
nuestra manera de relacionarnos como individuos y sociedad. El solo hecho de
que cualquier persona, en cualquier parte del mundo utilizando la cadena de
bloques, pueda enviar no solo dinero, sino valores de diferentes tipos, sin
permiso de nadie a donde quiera y hacerlo de forma segura, transparente, confiable
y totalmente aceptable por las partes, representa un hito del tal magnitud que
establece un antes y después de Satoshi Nakamoto. Reflexione sobre este hecho
en todo su contexto.
El detalle practico de
las criptomonedas lo observamos inicialmente en las finanzas, el surgimiento
del mercado de cryptos a nivel global fue el primer paso de esta evolución,
vemos como en tan poco tiempo hemos ido avanzando de los primeros intercambios
hacia un sistema que empieza a sumar actores mucho más complejos, desde exchange
realmente basados en blockchain, incipientes neo bancos y organizaciones
financieras de vanguardia que crecen impresionantemente, hasta asomos de banco
centrales de criptomonedas. Un crecimiento que como no está supeditado a
organismos controladores, aumenta su presencia de manera exponencial, acercando
los tiempos a meses, en lugar de años.
La tokenización de
sectores productivos primarios como la agricultura o las fábricas, están
empezando a dar muestras reales de operatividad, porque estemos claros, un
agricultor, pescador o fábrica de cabillas lo único que necesita para asumir a
las criptomonedas como dinero, es sencillamente poder realizar todo su ciclo
operativo con ellas, así de simple. Si un pescador del Perú, puede comprar sus
insumos y necesidades operativas y de infraestructuras con cryptos, venderlas
en el mercado interno con las mismas monedas, exportarlas utilizando, por
ejemplo a Tradelens, para todo el proceso de comercio internacional, ahorrar y
solicitar créditos, pagar sus nóminas directamente sin bancos, y en definitiva,
cumplir su ciclo de operaciones con criptomonedas de manera sencilla y natural,
lo hará. Y lo va a realizar porque en el proceso ahorró importantes costos
financieros y operativos, disminuyo tiempos de entrega y de liquidación,
aumento la eficiencia de su plataforma de ventas y eventualmente protegió su
patrimonio. Esto no es un cuento queridos amigos, es posible realizarlo hoy con
las plataformas existentes, lo traigo como ilustración tan solo para que
entendamos de una vez por todas, como
ostensiblemente avanzamos muchas veces sin darnos cuenta de lo que realmente
está pasando, están cambiando las estructuras económicas.
Como hemos aclarado en
muchísimas oportunidades, este movimiento que se está dando a nivel mundial
enfrenta a diferentes actores que pretenden ser los protagonistas de ese
futuro, nada está definido en este aspecto y nadie tiene hoy el triunfo
asegurado. Los gobiernos y los organismos internacionales seguirán moviéndose a
su ritmo, y serán los privados quienes van a forzar el rompimiento en algún
momento, esta rotura como hemos visto se está produciendo ahora, a su manera y
a sus tiempos. Tener claridad y profundizar el detalle es fundamental si se
quiere ver y entender el panorama completo, quienes desde sus trincheras se
queden solo viendo su zona de confort, corre el riesgo de quedar para la
historia.