Mi opinión.

Venezuela: Señales, retórica y realidad.

En las últimas semanas desde el alto gobierno se vienen dando señales contradictorias entre los diferentes voceros que rigen los destinos del país, por un lado se producen reuniones con sectores empresariales importantes, se asiste a encuentros a los que hacia muchísimo tiempo no iba un ministro con los productores nacionales, pero por otra parte se vuelve al discurso sesentón del capitalismo salvaje, del no volverán y en fin de toda esa retórica de izquierda que al final termina echándole la culpa de la inflación y la escases a los acaparadores y hambreadores del pueblo.

En lo absoluto estas contradicciones son nuevas, solo que con la muerte del máximo líder de este proceso las mismas se han acrecentado, no es nada fácil para quienes gobiernan a Venezuela deslastrarse de esa camisa de fuerza impuesta por Chávez sobre la economía, basta con acceder a la página web del Consejo Nacional Electoral y revisar el programa de gobierno del oficialismo para el periodo 2013-2019, una breve ojeada a dicho documento nos indicara cuales eran las reales prioridades del régimen, para ellos “ es un programa de transición al socialismo y de radicalización de la democracia participativa y protagónica” y estipulan que “este es un programa precisamente para afianzarlo y profundizarlo; direccionado hacia una radical supresión de la lógica del capital que debe irse cumpliendo paso a paso, pero sin aminorar el ritmo de avance hacia el socialismo”, esa es la realidad de un régimen que se mueve entre la instauración de un Estado comunal y los graves y profundos desequilibrios económicos a los que nos ha sometido a los venezolanos en los últimos años.

Consideran el gobierno que aquí solo hay que “gobernar a la economía” tienen en su más supina ignorancia una actuación que raya en lo criminal, han desperdiciado 14 años de una bonanza petrolera jamás vista en nuestro país, se han inventado decenas de planes y hoy más de la mitad del parque industrial desapareció, expropiaron cientos de empresas, de todos los tipos y tamaños, pero son incapaces de suplir a la población de productos básicos como la harina de maíz, el azúcar, el aceite, el papel higiénico, ni siquiera nos abastecemos de café, producto que exportábamos en grandes cantidades.

No basta con dar ciertas señales positivas, si realmente el gobierno está en la senda de la rectificación económica, debe hacerse sin estridencias ni esa retórica que solo pone piedras en el camino, con más de 10 años de un control de cambio agotado e inútil, se impone el dialogo sincero y fructífero para poder ir saliendo de esta crisis, ojala que se entienda de una vez por todas que es con el concurso de todos los actores económicos que podemos avanzar, si esa es la ruta escogida habrá buenas noticias, si por el contrario se insiste en imponer un trasnochado modelo dizque socialista, veremos cómo se agudiza la crisis en los próximos meses.