#Economía Física: “Ni siquiera se encuentra almidón para planchar”
jueves, 25 de septiembre de 2014
El empresario indicó que se le dificulta cumplir a tiempo la entrega de la ropa por la falta de insumos
OFICIOS EN EXTINCIÓN II
ANA DÍAZ
ANADIAZ@EL-NACIONAL.COM
25 DE SEPTIEMBRE 2014 - 12:01 AM
Cuando José Salcedo, contador de profesión, instaló la tintorería-lavandería hace dos años en Caracas, el negocio prometía ser próspero de acuerdo con el estudio de mercado que había hecho. “Mi aspiración siempre fue establecerme por mi propia cuenta, así que me asocié con otro emprendedor. Nos fue bien hasta comienzos de este año, cuando empezaron a escasear los insumos”, dijo.
El empresario, de 40 años de edad, casado y con 2 hijos estudiantes, trabajó en firmas auditoras y bancarias. A él y a su socio les llevó varios años reunir el capital para montar el establecimiento comercial, que alquilaron y luego compraron, y adquirir la lavadora, la secadora, las planchas industriales y el mobiliario necesarios para la prestación del servicio. “En poco tiempo logramos captar una clientela que siempre estuvo satisfecha de nuestro trabajo”, afirmó.
Emplean diez personas, nómina que les resulta difícil sostener por la caída de la actividad como consecuencia de la falta de insumos. “No hay el detergente (jabón en polvo), el blanqueador ni el enjuague a granel que necesitamos. Las distribuidoras alegan que los fabricantes bajaron drásticamente su producción por la falta de materia prima y la tardanza del gobierno en aprobar y otorgar las divisas”, explicó Salcedo.
Otro obstáculo es que si consiguen los productos no son de las mejores marcas, lo cual resta calidad al trabajo, además de que el apresto para el planchado de las prendas desapareció del mercado hace varios meses. “Ni siquiera se encuentra almidón para planchar”, agregó.
“Las cosas deben estar muy mal porque el almidón se extrae de la yuca que es de fácil cultivo y en Venezuela se siembra en cualquier conuco”, dijo, y añadió que tampoco consiguen los ganchos de ropa ni los cartones que se colocan en los cuellos de las camisas para que no se arruguen, y las bolsas de plástico ya comienzan a faltar.
Salcedo señaló que a la escasez se suma la inflación de 1.000% en los últimos meses debido al alza constante de los costos de los productos, cuando se encuentran, lo cual incide en los precios del servicio al consumidor. “El desempeño del negocio se ha contraído 40% y no queremos bajar la santamaría si se profundiza la depresión”.
Contó que cuando el cliente trae las prendas, generalmente las confeccionadas con telas delicadas que no se pueden lavar en casa como fluxes y vestidos de lino, seda, chiffon o shangtú, entre otras piezas de fiesta, le explican las limitaciones que tienen con los insumos. “Muchas veces la gente se lleva la ropa sin lavar y va a otros locales, pero siempre regresan cuando constatan que allí tienen los mismos problemas”.
La escasez también ha dificultado los tiempos de entrega de la ropa, que en condiciones normales es de cinco días: “Pero ahora no puedes asegurar a los clientes cuándo pueden retirar la ropa si no cuentas con inventarios suficientes de insumos”.
El Dato
Cifras de la Cámara de Tintorerías, Lavanderías y Afines indican que hay 105 establecimientos entre franquicias e individuales, que emplean a más de 300 trabajadores en el Distrito Capital, Miranda y Vargas. La cámara, que presta asesoría comercial y laboral a sus afiliados, aspira a cubrir los comercios del ramo de todo el país. Prestan servicios de lunes a viernes y en los centros comerciales trabajan hasta los sábados.
Publicado el 25 de Septiembre en www.el-nacional.com