El oficio de ser zapatero está en peligro de extinción con la crisis económica que azota cada día más. El costo de los materiales requeridos se incrementó al menos tres veces en el año pasado.
José Valecillos contó que en los 54 años que lleva trabajando en los alrededores de la Plaza Miranda, ahora es que "se las está viendo negras". "Ya no hay ganancias, yo tengo que hacer milagros para mantener a mis clientes. Ya la gente no pide lo mismo que antes", señaló.
Destacó que todos los implementos utilizados han subido de precio. Para finales del año pasado, un cambio de suela de zapatos deportivos podían costar Bs. 12.000, pero ahora subió a Bs. 20.000.
El pote pequeño de pega para zapatos ya se ubica desde Bs. 1.500 a Bs. 2.000, lo que hace más costoso el precio final en el que también debe incluirse la mano de obra.
Nelson Cárdenas explicó que la demanda ha caído al menos 90% porque los precios han incrementado y los materiales son difíciles de conseguir.
"Lo que yo hago aquí es perder tiempo", dijo Enrique Vivas, quien también trabaja en el centro de la ciudad. Según él, logra conseguir dinero pegando suelas o tapitas.
"Ya no hay trabajo. Para arreglar un zapato tienes que cobrar al menos 22.000 bolívares porque la suela cuesta Bs. 17.000 y tenemos que ganar algo", se lamentó.
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