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#Venezuela Las Huellas: Conversión de Quimbiotec al socialismo apagó la producción

domingo, 28 de febrero de 2016


De ser una empresa pionera en Latinoamérica, abastecer casi completamente el mercado nacional y exportar hemoderivados producidos en el país en 2010, Quimbiotec pasó en 2015 a estar más de 5 meses parada. En medio de una epidemia de zika que desató la aparición del síndrome Guillain-Barré en 412 personas desde diciembre, y que ha cobrado la vida de 22, aumentó la demanda de inmunoglobulina y albúmina para su tratamiento. El Ministerio de Salud recurrió este año a las importaciones para responder a la población.

La desprofesionalización en los liderazgos de la planta es la razón que encuentran algunos trabajadores para explicar el declive. En 2012 se modificaron los estatutos de Quimbiotec y la directiva, que antes ejercía la misma cabeza del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas, pasó a ser nombrada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología. La empresa comenzó a remover a la mayoría de los gerentes con amplia trayectoria.

La presidente actual, Imeria Odremán, envió el 17 de agosto de 2015 un punto de cuenta al ministro Manuel Fernández en el que informaba que en Quimbiotec “existe predominio de la tecnocracia y la meritocracia como valores, lo que trae como consecuencia resistencia al cambio”. En el documento no se especifica el cambio que ameritaba abandonar la especialización de los empleados en una empresa que trabaja con productos biológicos. El Nacional intentó sin éxito consultar a la funcionaria al respecto.

“La empresa funcionaba a la perfección. Una vez que entraron los nuevos gerentes, afines al gobierno y no preparados, ha sido imposible encaminarla. La producción de lotes disminuyó y en agosto fue la paralización total”, cuenta un trabajador del área de Control de Calidad.

La estrella se apaga. En 2010 Quimbiotec produjo 1.000.000 de unidades de los hemoderivados que fabrica: albúmina, inmunoglobulina de varios tipos y factor VIII. Cuatro años después, según la memoria y cuenta del Ministerio de Ciencia y Tecnología, la empresa manufacturó 699.251 unidades y exportó 19.200 a Bolivia. Aunque para 2015 la meta era alcanzar los 800.000 viales, la paralización de la planta desde agosto por dificultades en la remodelación lo impidió. Nixon Berríos, dirigente sindical, asegura que no llegaron a fabricar ni siquiera 200.000 frascos de albúmina (en 2010 la producción alcanzó 359.000 unidades).

La reanudación de la empresa se logró a mediados de febrero. Aunque problemas con el servicio de agua amenazaron con volver a detener la producción. El lunes de esta semana continuaron las actividades para sacar al mercado a finales de marzo el primer lote del año.

A los inconvenientes de infraestructura se unen las fallas en la captación de personal calificado. “El Departamento de Compras lo desmantelaron. Distribuyeron a administradores en otras áreas como Control de Calidad, lo que produce retraso en la adquisición de insumos. Los reactivos y las pipetas que tenemos están vencidos y no hemos podido calibrar algunos equipos. En Serología no hay personal, de ocho personas quedan dos, una está embarazada y otra de reposo. Optamos por pedirles a otros que habían trabajado en esa área que vuelvan temporalmente porque ese es el primer paso, si no se comprueba el estado del plasma no podemos activar la producción”, cuenta el empleado.

Estampida. Dos advertencias clave hizo Odremán en el punto de cuenta: “Se espera un incremento en las renuncias del personal tanto operativo como gerencial” y “existe la probabilidad de la paralización parcial o total de la planta de hemoderivados, producto de fallas en el suministro de materia prima y dificultades de liquidez”.

Desde agosto, más de 100 trabajadores se fueron por la incertidumbre, asegura Berríos.

Rafael Rico trabajó por 8 años en Quimbiotec en los departamentos de Mantenimiento y Aseguramiento de Calidad. En octubre de 2015 decidió irse: “La parada de la planta porque no fue planificada y la gerencia la hizo desde la falta de conocimiento y excluyendo a Mantenimiento, que solía hacer esas tareas. Ahora el Estado sufre las consecuencias”.

Otro trabajador que también renunció dijo que estaría dispuesto a volver en un escenario en el que “pudiera ayudar”: “Se nos inculcó que trabajábamos con salvavidas y que detrás de cada vial estaba un paciente esperándonos. El hecho de que de la noche a la mañana eso se haya acabado es inconcebible”.

El dato. El Sindicato de Trabajadores de Quimbiotec denunció que en la cadena nacional en la que se anunció el “motor farmacéutico” se exhibieron como productos de Espromed Bio unidades de albúmina de la empresa de hemoderivados. Además, se oponen a que se utilicen activos y presupuesto de Quimbiotec para distribuir los fármacos de Espromed Bio. “La semana pasada robaron un camión con factor VIII importado”, criticó Nixon Berríos, sindicalista.

Publicado en El Nacional: http://www.el-nacional.com/sociedad/Conversion-Quimbiotec-socialismo-apago-produccion_0_801519958.html
 
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