YANETH FERNÁNDEZ | EL UNIVERSAL
domingo 10 de agosto de 2014 12:00 AM
Un mercado condicionado por las inversiones y la oferta de empleos estables y de calidad se convierte en un anhelo que se desvanece en la realidad.
De acuerdo a las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE), en la última década el número de patronos privados experimenta una contracción de 20,09%. Esto equivale a 108.081 empleadores menos en 10 años.
Hasta abril de 2014, que es la última data que reporta el INE, apenas 429.890 patronos privados se mantenían en el país. Aunque el organismo no detalla en qué condiciones sobreviven, los sectores empresariales han alertado que la inseguridad jurídica y la política de controles cercan al sector. Prueba de ello es que cada vez son menos los que invierten y queda evidenciado cuando el propio INE muestra en sus estudios una reducción paulatina del número de patronos privados.
Lo preocupante de la situación es que tiende agudizarse en la medida que no se adopten los correctivos necesarios.
El abogado Alexis Aguirre, experto en derecho laboral, precisó que las empresas operan hoy con grandes sacrificios, dada a la inamovilidad laboral que rige desde 2002. Refirió que algunos patronos han asumido costos de nómina, pese a no estar produciendo. Recordó que la Ley del Trabajo establece pena de prisión por cierre ilegal e injustificado.
La inquietud no es solo patronal. Este año, los trabajadores han tomado parte en el asunto y, más allá de exigir respeto a sus compromisos contractuales, han tomado las calles para abogar por su estabilidad laboral ante el riesgo que corren de perder sus puestos de trabajo en medio de un mercado con escasas ofertas.
Froilán Barrios, del Frente Autónomo en Defensa del Empleo, el Salario y el Sindicato (Fadess), recordó que justamente la desaparición de empleos y el cierre de empresas fueron las causas que motivaron a una movilización de trabajadores en el estado Carabobo semanas atrás.
Expresó que las cifras son "aterradoras" en la otrora pujante principal zona industrial del país. "De una industria generadora de 186.632 empleos directos y más de 450.000 indirectos, solo funciona en promedio entre un 40 % y 50% de su capacidad instalada", detalló.
El panorama no es menos diferente en el estado Bolívar, otra importante entidad industrial del país. Según cifras del Fadess, en el caso del parque industrial de Guayana más de 50.000 puestos de trabajo directos y más de 100.000 indirectos están "amenazados de extinción".
Barrios alertó que "de no corregirse el rumbo, estaremos en presencia de un tsunami laboral agravado con las recientes cifras de la Cepal para finales del presente año, donde Venezuela sufrirá contracción de la economía en 0,5%".
La unidad de los trabajadores, mantener el objetivo de lucha por los derechos y reivindicaciones laborales, reforzar la estrategia de movilización por un empleo digno y decente, son a juicio de Marcela Máspero, coordinadora de Únete, clave para superar las crisis.
A esto se suma, según los representantes sindicales, revertir el modelo de importaciones que se ha profundizado en los últimos años y fortalecer la producción nacional.
Los sectores de manufactura y construcción son los más afectados, pese a su importancia en la generación de empleos de calidad. Otros como comercio y servicios, que habían servido para palear la crisis, ya comienzan a demostrar debilidad ante la falta de inventarios.
Publicado el 10 de Agosto en www.eluniversal.com
