El destino de los periodistas brasileños de la televisora Rede Record, Leandro Stoliar y Gilson Souza, expulsados por el Gobierno de Nicolás Maduro, luego de ser “retenidos” por el Sebín cuando reportaban la obra de Odebrecht, Puente Cacique Nigale, en Zulia, es Sao Paulo.
El sábado, los comunicadores estaban acompañados por los periodistas venezolanos Jesús Urbina y María José Túa, activistas de Transparencia Venezuela, en un recorrido por Mara para reportar la condición en la que está la obra de la empresa carioca, acusada de sobornos para lograr contratos con Gobierno de Latinoamérica.
Funcionarios del Sebín retuvieron por varias horas a los profesionales mientras se investigaba la legalidad de la presencia de los brasileños en el territorio nacional. Pasadas las 10.00 de la noche fueron liberados, tras la intervención diplomática de la Embajada de Brasil en Caracas y gestiones de gremios, organizaciones de defensa de derechos humanos. El Codhez ejerció la defensa para la protección de los derechos fundamentales.
Stoliar y Souza fueron escoltados por la policía Política hasta un hotel de la ciudad, donde pasaron la noche para salir expulsado de Venezuela el domingo. A media mañana, fueron llevados nuevamente a la sede del Sebín, a la espera de la avioneta que los trasladaría de Maracaibo a Maiquetía, al aeropuerto internacional de Simón Bolívar, para retornar a Sao Paulo, Brasil. A la 1.30 de la tarde salieron del Zulia. Ya las 5.30 tomaron el vuelo rumbo a Lima para el trasbordo a Brasil.
Por cinco horas más permanecieron custodiados bajo órdenes del Ministerio de Interior Justicia y Paz para ser deportados. El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa acusó que estaban “secuestrados”, publicó en la cuenta de Twitter. 24 horas bajo la vigilancia de los agentes policiales.
Mediante comunicado señaló que fueron expulsados “como delincuentes, con orden de conducción, con la excusa de que no tienen permiso para trabajar en Venezuela. El SNTP recuerda que buscar y recibir información son derechos humanos, por lo que cualquier práctica que impida el ejercicio de esos derechos es violatoria de la ley y acarrea responsabilidades”.
Publicado en: La Verdad
